Yo debo estar loco o me falta un tornillo en definitiva. Mi antiguo proveedor de máquinas y hoy excelente amigo me llama un día y me dice que intercambió un par de cuchillas de guillotina Schneider un extraño fierro… ¡Ven a verla, está bien bonita! Es… es una… se usa para los libros de eso estoy seguro, dice mi amigo.
Miro la máquina en cuestión y no se que decir, por un lado es una maravilla de fundición, todo está en su lugar, su volante de inercia, las aceiteras, las manijas, todo es de una solidez y belleza envidiables y para los años que calculo que tiene su estado es óptimo y sin embargo, me asalta una pregunta ¿Que diablos es y para que sirve?.
Sorprendidos en tan genial pieza de ingeniería y luego de un rato de mover los mecanismos, ayudado por una ilustración que recordaba haber visto en Wikipedia concluyo que es una redondeadora de lomos. Una maquina desarrollada en la última expansión de la industria editorial europea, desarrollada para generar la curvatura de una encuadernación de una forma rápida y precisa.
Hoy por hoy el negocio de los libros es un negocio de libros con lomo cuadrado, un reducido numero de obras se encuaderna en lomo redondo. Adquirí la máquina porque de no hacerlo se hubiera ido por kilo a la fundición, por puro romanticismo y locura, no se si le daré el mejor uso y si con esto el taller estará mas cerca de parecer un museo, el asunto es que ya está en El Ombligo del Libro y quise compartirlo con ustedes.
Excelente! Habrá después un video donde se aprecie cómo funciona? Saludos!