Detalle del springback con las tapas y el spring (lomo) recién terminados.

Uno de los estilos que mas me gusta encuadernar es el Springback como se le llama en habla inglesa, un libro en blanco que surgió por ahi de mediados del siglo XIX, una encuadernación fuerte pero al mismo tiempo de gran apertura. En México se le conoció como «Libro Mayor» ya que por lo general, servía en los despachos de contabilidad para registrar los ingresos y egresos de un negocio, en Argentina y España se le conoce como Encuadernación de Protocolo Notarial por su utilidad como libro en blanco para este y otros tipos de procesos legales.

La encuadernación que ven en las imagenes corresponden a un experimento de esos que un encuadernador siempre tiene que estar dispuesto a llevar a cabo, adherir un pergamino por completo a la encuadernación, puesto que es sabido que este material reacciona mal a las fluctuaciones de humedad y sin embargo ¿Si es un libro en blanco que pierdo si con los años el pergamino se deteriora?.

Springback forrado de papel blanco como paso previo a su recubrimiento.

Tomando algunos consejos de manuales como el de Gómez Raggio y Josep Cambras me aventuré a pegar un pergamino después de haber forrrado de papel blanco la cartera, sin embargo mi primer intento con el pergamino fue infructuoso ya que no logré pegar el material por mas empeño que puse en ello. En el segundo intento cambié de material y utilicé una vitela que, aunque mas delgada no significó menos paciencia para adherirla al cartón y aún mas, rompí la vitela en un intento desmedido por marcar los nervios.

Asi me quedé con tres fragmentos rotos de vitela en las manos, lo que significó cambiar de una encuadernación entera a una emergente encuadernación en bandas, no siempre se gana experimentando pero estoy seguro que en el camino mucho se aprende.

El springback terminado y forrado de vitela.